Luzón es un pequeño pueblo de la provincia de Guadalajara, situado en la comarca de Molina de Aragón que apenas llega a los 80 habitantes.
Lo atraviesa el río Tajuña cuando apenas todavía es un arroyo, pero que contiene una buena cantidad de truchas.
La historia nos indica que otro Luzón, la isla más grande de Filipinas, debe su nombre a este pequeño pueblo. En Molina de Aragón se encuentra la «Casa del Virrey de Manila», debido a que la esposa del Virrey era de esta localidad de Guadalajara.
Así mismo, se cree que el nombre de Luzón proviene del pueblo celtíbero de los lusones que se asentaron en esta zona, prueba de ello son las ruinas del Castro de La Cava.
En el pueblo de Luzón, encontramos el coto sin muerte en el río Tajuña. Los límites están comprendidos entre el pueblo y el límite con el término municipal de Anguita, con una longitud de 4,4 km.
Por la Autovía de Aragón (N-II), llegaremos a la población de Alcolea del Pinar, donde tomaremos la N-211 en dirección a Molina de Aragón. A 17 km. está el desvío a Luzón.(2,5 km).
Desde el mismo comienzo del coto, sale un camino transitable en coche en paralelo al río, que podremos tomar para llegar hasta el límite inferior, desde donde comenzaremos a pescar aguas arriba.
Este tramo de pesca sin muerte, es todo un reto para el pescador. Si se consigue alguna captura, se puede considerar un maestro en esto de la pesca a mosca.
Aconsejamos cañas no superiores a 7 pies y líneas del n°3 como máximo. El bajo de línea no debe superar los 1,5 mts. Esto es debido a la anchura del río, que no supera el metro en la mayoría de las zonas, y a la abundancia de árboles y vegetación en las orillas.
La cautela aquí es imprescindible, pues nos encontraremos con unas truchas muy huidizas que se asustarán al mínimo ruido que hagamos, por lo que debemos evitar en la medida de lo posible caminar por el lecho del río.
La mejor época para pescar en esta zona, es el principio de la temporada hasta primeros de junio como máximo. Más tarde, el río bajará con muy poco caudal ( prácticamente seco ) y la vegetación lo cubrirá todo.
Por la dificultad de este tramo, solo aconsejamos probar suerte a los pescadores expertos que quieran afrontar una experiencia inolvidable, puesto que una vez que le cojan el tranquillo al sitio, la cantidad de capturas puede ser muy numerosa.